Introducción del instrumento
El termostato ajusta automáticamente la cantidad de agua que entra al radiador según la temperatura del agua de refrigeración y modifica el rango de circulación para ajustar la capacidad de disipación de calor del sistema de refrigeración y garantizar que el motor funcione dentro del rango de temperatura adecuado. El termostato debe mantenerse en buen estado técnico; de lo contrario, afectará gravemente el funcionamiento normal del motor. Si la válvula principal del termostato se abre demasiado tarde, el motor se sobrecalentará; si se abre demasiado pronto, el tiempo de precalentamiento del motor se prolongará y la temperatura del motor bajará demasiado.
En resumen, la función del termostato es evitar que el motor se enfríe demasiado. Por ejemplo, si el motor funciona con normalidad y no se utiliza el termostato al conducir en invierno, la temperatura del motor podría ser demasiado baja. En ese caso, es necesario detener temporalmente la circulación de agua para asegurar que la temperatura del motor no baje demasiado.
Cómo funciona esta sección
El termostato principal utilizado es un termostato de cera. Cuando la temperatura de refrigeración es inferior al valor especificado, la parafina refinada del sensor del termostato se solidifica. La válvula del termostato cierra el canal entre el motor y el radiador mediante la acción de un resorte, y el refrigerante regresa al motor a través de la bomba de agua para una pequeña circulación en el motor. Cuando la temperatura del refrigerante alcanza el valor especificado, la parafina comienza a fundirse y gradualmente se vuelve líquida, aumentando su volumen y comprimiendo el tubo de goma, haciéndolo contraer. Cuando el tubo de goma se contrae, ejerce un empuje ascendente sobre la varilla de empuje, que a su vez ejerce un empuje inverso descendente sobre la válvula para abrirla. En este momento, el refrigerante fluye de vuelta al motor a través del radiador y la válvula del termostato, y luego a través de la bomba de agua para una mayor circulación. La mayoría de los termostatos están instalados en el tubo de salida de la culata, lo que ofrece las ventajas de una estructura simple y facilita la eliminación de burbujas en el sistema de refrigeración. La desventaja es que el termostato se abre y cierra con frecuencia durante el funcionamiento, lo que provoca oscilaciones.