Una lámina es una cubierta (una pieza semicircular ligeramente saliente sobre la rueda) que, como su nombre indica, cubre la carrocería exterior de vehículos, tanto a motor como a no motor. De acuerdo con la dinámica de fluidos, reduce el coeficiente de resistencia al viento y permite una mayor suavidad de marcha.
Un guardabarros también se llama guardabarros (denominado así por la forma y posición de esta parte de la carrocería, que se asemeja al ala de un pájaro). Las placas se ubican en el exterior de la rueda. Su función es reducir la resistencia al viento según la dinámica de fluidos, para que el vehículo funcione con mayor suavidad. Según su posición de instalación, se dividen en placa delantera y trasera. La placa delantera se instala sobre la rueda delantera. Dado que la rueda delantera tiene la función de dirección, debe garantizar el máximo espacio libre al girar. La hoja trasera está libre de fricción, pero por razones aerodinámicas, presenta un arco ligeramente arqueado que sobresale hacia afuera.
En segundo lugar, el guardabarros delantero facilita la conducción, evita que las ruedas se enganchen con arena y salpicaduras de barro en la parte inferior del vehículo, y reduce los daños al chasis y la corrosión. Por lo tanto, los materiales utilizados deben ser resistentes a la intemperie y fáciles de moldear. El guardabarros delantero de muchos automóviles está hecho de plástico con cierta elasticidad, lo que le proporciona amortiguación y mayor seguridad.