Las luces de circulación diurna (también conocidas como luces de circulación diurna) y las luces de circulación diurna están configuradas para indicar la presencia de vehículos en el frente durante el día y se instalan en ambos lados del frente.
Las luces de circulación diurna se utilizan para:
Es una lámpara que facilita la identificación de un vehículo durante el día. Su propósito no es que el conductor pueda ver la carretera, sino avisar a los demás de que se aproxima un coche. Por lo tanto, esta lámpara no es una luz, sino una luz de señalización. Claro que añadir luces diurnas puede hacer que el coche luzca más atractivo y deslumbrante, pero su mayor efecto no es la estética, sino que permite reconocer el vehículo.
Encender las luces de circulación diurna reduce el riesgo de accidentes de tráfico en un 12,4 % al conducir en el extranjero. También reduce el riesgo de muerte en un 26,4 %. En resumen, el objetivo de los semáforos diurnos es la seguridad vial. Por ello, en los últimos años, muchos países han formulado los índices pertinentes de luces de circulación diurna para garantizar que su producción e instalación realmente contribuyan a garantizar la seguridad.
El aspecto más importante de las luces diurnas LED es el rendimiento de la distribución de la luz. Estas luces deben cumplir con los requisitos básicos de brillo, pero no deben ser demasiado brillantes para no molestar a los demás. En cuanto a los parámetros técnicos, la intensidad luminosa en el eje de referencia no debe ser inferior a 400 cd, y la intensidad luminosa en otras direcciones no debe ser inferior al producto porcentual de 400 cd por los puntos correspondientes en el diagrama de distribución de la luz. En cualquier dirección, la intensidad luminosa emitida por la luminaria no debe ser superior al 80 %.0 cd.